En los ¨²ltimos a?os los pa¨ªses industrializados se han quejado de que los inundan los solicitantes de asilo, y han adoptado pol¨ªticas cada vez m¨¢s estrictas para detener la ola de refugiados y asegurar la protecci¨®n de sus fronteras. Desde 2002, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha estado observando una tendencia a la baja en las solicitudes de asilo presentadas en los pa¨ªses industrializados. En el ¨²ltimo informe sobre las cifras y las tendencias del asilo en los pa¨ªses industrializados en 2006 se muestra un descenso constante en 50 pa¨ªses industrializados (44 europeos y 6 no europeos). El n¨²mero correspondiente a 2006 fue el m¨¢s bajo en muchos a?os y, en algunos casos, incluso decenios. Por ejemplo, en Alemania y Dinamarca se registr¨® la cifra m¨¢s baja desde 1983, en Nueva Zelandia, desde 1988, y en el Reino Unido, desde 1989. En Francia, el n¨²mero de solicitudes de asilo presentadas en 2006 fue el m¨¢s bajo desde 1998. Los 25 pa¨ªses de la Uni¨®n Europea recibieron un 53% menos de solicitudes en 2006 en comparaci¨®n con 2002, mientras que en Europa en su totalidad se registr¨® una disminuci¨®n del 54%. Algunos expertos est¨¢n de acuerdo en que detr¨¢s de esta tendencia a la baja hay unas pol¨ªticas de asilo m¨¢s estrictas, mientras que otros prefieren se?alar el sentimiento creciente de intolerancia y xenofobia que alimenta esas pol¨ªticas.

Refiri¨¦ndose a los efectos de unas pol¨ªticas m¨¢s estrictas, Ant¨®nio Guterres, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, dijo que el ACNUR reconoc¨ªa plenamente el derecho de los Estados a la gesti¨®n responsable de sus fronteras, a?adiendo que "sin embargo, los Estados tambi¨¦n deber¨ªan reconocer que proteger las fronteras no debe impedir el acceso f¨ªsico a los procedimientos de asilo o a la determinaci¨®n imparcial del estatuto de refugiado de aquellos que pueden acogerse a ello en virtud del derecho internacional". Por su parte, Sherif Elsayed-Ali, jefe del equipo de los derechos de los migrantes y refugiados en la secretar¨ªa de Amnist¨ªa Internacional, reconoci¨® que las complejas pol¨ªticas adoptadas por los Estados no s¨®lo ten¨ªan "efectos negativos" para el acceso al asilo, sino tambi¨¦n ocasionaban la disminuci¨®n del n¨²mero de solicitantes de asilo. Dijo adem¨¢s que "esas [pol¨ªticas] incluyen los intentos crecientes de algunos Estados de descargar sus obligaciones sobre otros Estados por medio de la interceptaci¨®n, la tramitaci¨®n extraterritorial y otros medios. Los Estados tambi¨¦n utilizan medidas disuasorias para detener la corriente de solicitantes de asilo, tales como la detenci¨®n de los solicitantes de asilo rechazados y la limitaci¨®n de su acceso a la asistencia y el empleo empuj¨¢ndolos a la miseria".

Bill Frelick, Director de pol¨ªticas para los refugiados en Human Rights Watch, observ¨® sin embargo que las medidas que proh¨ªben la entrada con frecuencia no distinguen entre las personas necesitadas de protecci¨®n internacional y otros migrantes indocumentados. El Departamento de Informaci¨®n P¨²blica de las Naciones Unidas, en su lista de 10 historias que el mundo deber¨ªa conocer mejor correspondiente a 2006, hab¨ªa advertido de que se estaba desdibujando la l¨ªnea entre las v¨ªctimas que huyen de la persecuci¨®n y los migrantes que buscan oportunidades econ¨®micas. El Sr. Guterres dijo que "la confusi¨®n con frecuencia la generan aquellos que mezclan deliberadamente los problemas de seguridad, terrorismo, corrientes de migrantes y cuestiones de asilo para sacar provecho del miedo y el recelo que producen. La realidad rara vez apoya la ret¨®rica populista".

Doudou Di¨¨ne, Relator Especial sobre las formas contempor¨¢neas de racismo, discriminaci¨®n racial, xenofobia y formas conexas de intolerancia, habl¨® ante el Comit¨¦ para la Eliminaci¨®n de la Discriminaci¨®n Racial en 2006 en Ginebra, alert¨¢ndolo de las repercusiones crecientes del racismo y la xenofobia en el mundo y sus efectos en las pol¨ªticas de asilo. Escribi¨® lo siguiente: "El racismo y la xenofobia en cierto sentido est¨¢n saliendo del armario, se est¨¢n adentrando gradualmente en las normas que dictan los agentes pol¨ªticos predominantes. Este hecho se manifiesta no solamente en el alejamiento de la diversidad cultural que manifiestan muchos Estados, sino tambi¨¦n en las pol¨ªticas restrictivas con respecto a los inmigrantes y los solicitantes de asilo".

El Sr. Di¨¨ne, en un informe presentado al Consejo de Derechos Humanos en 2007, examin¨® la situaci¨®n en el Reino Unido. Afirmaba que el ambiente negativo en torno a las cuestiones de asilo y refugiados estaba estrechamente vinculado a los frecuentes cambios de pol¨ªtica destinados a disuadir cada vez m¨¢s a los solicitantes de asilo de entrar en el pa¨ªs, especialmente despu¨¦s de la explosi¨®n de bombas en Londres en julio de 2005. La distribuci¨®n de las solicitudes de asilo calculada por el ACNUR para 2006 en el Reino Unido mostr¨® que el n¨²mero de nuevas solicitudes (27.000) presentadas hab¨ªa descendido en un 10% en comparaci¨®n con 2005, en un tercio (31%) en comparaci¨®n con 2004, m¨¢s de la mitad (54%) en comparaci¨®n con 2003, y pr¨¢cticamente tres cuartas partes (73%) en comparaci¨®n con 2002, cuando el Reino Unido era uno de los principales destinos para los solicitantes de asilo, con m¨¢s de 103.000 nuevas solicitudes.

El Sr. Elsayed-Ali deplor¨® el hecho de que "muchos gobiernos utilizaban el miedo, por lo general irracional e injustificado, a los solicitantes de asilo con fines pol¨ªticos y electorales, haciendo aprobar pol¨ªticas duras que alimentaban la xenofobia y la intolerancia". El Sr. Frelick insisti¨® en los efectos de este miedo despu¨¦s del 11 de septiembre de 2001, afirmando que los Estados Unidos hab¨ªan suspendido su programa de asentamiento de refugiados y que su Congreso hab¨ªa aprobado una multitud de proyectos, "muchos de los cuales estaban centrados en la limitaci¨®n del asilo". Observ¨® que "los refugiados y los solicitantes de asilo se convirtieron en objetivos f¨¢ciles y visibles producidos por este miedo al terrorismo, aunque hubiera escasas pruebas de que los terroristas habr¨ªan utilizado o podr¨ªan utilizar los sistemas para los refugiados y el asilo para penetrar en el pa¨ªs".

En 2003, el Departamento de Seguridad Interior de los Estados Unidos introdujo la Operaci¨®n Liberty Shield, una pol¨ªtica a escala nacional que expon¨ªa las normas de detenci¨®n para los solicitantes de asilo de origen musulm¨¢n y ¨¢rabe. Se nombraba a m¨¢s de 30 pa¨ªses y territorios clasificados. Los defensores de los derechos humanos denunciaron en¨¦rgicamente la Operaci¨®n, ahora desaparecida, que consideraban flagrantemente racista. Tambi¨¦n en 2003, la Oficina Federal para Refugiados y Migraci¨®n de Alemania envi¨® cartas de advertencia a 20.000 refugiados iraqu¨ªes sobre la revocaci¨®n de su estatuto. Seg¨²n Human Rights Watch, que ha estado protestando contra las revocaciones masivas, la Oficina ha privado en la actualidad a 18.000 personas de su condici¨®n de refugiados. "El derrocamiento de [Saddam] Hussein no significa que ahora los refugiados iraqu¨ªes puedan volver a casa en condiciones de seguridad", afirm¨® el se?or Frelick. "El Gobierno debe reconocer que la persecuci¨®n y la violencia generalizada contin¨²an a pesar del cambio de gobierno en Bagdad".

En 2005 en Suiza el n¨²mero de solicitudes de asilo fue el m¨¢s bajo desde 1986. Aun as¨ª, el Consejo Federal aprob¨® nuevas leyes sobre el asilo que exig¨ªan que los solicitantes de asilo tuvieran documentos v¨¢lidos de viaje o identidad. El ACNUR denunci¨® r¨¢pidamente las disposiciones por ser las m¨¢s estrictas en Europa, recordando las dificultades que ten¨ªan las personas que hu¨ªan temiendo por su vida para obtener esos documentos.

El informe estad¨ªstico del ACNUR sobre las 10 principales naciones de solicitantes de asilo por pa¨ªs de asilo de 2002 a 2006 mostraba los efectos crecientes de las leyes disuasorias. El Irak contaba con 1.305 solicitudes para entrar en el Reino Unido en 2006 en comparaci¨®n con las 14.565 en 2002, y 2.065 solicitudes para Alemania en comparaci¨®n con 10.367 en 2002; Turqu¨ªa ten¨ªa 693 solicitudes para Suiza en 2006 en comparaci¨®n con 1.932 en 2002. En los Estados Unidos, la lista solamente para 2006 mostraba que, aparte de Indonesia, ning¨²n pa¨ªs musulm¨¢n formaba parte de los 10 pa¨ªses principales.

La Convenci¨®n sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951 cumpli¨® 50 a?os en 2001. Muchos cr¨ªticos cuestionaron su pertinencia entonces, impulsando a Erica Seller, Directora del Departamento de Protecci¨®n Internacional en el ACNUR, a calificar la Convenci¨®n de "muro tras el cual pueden cobijarse los refugiados". Hoy d¨ªa, con el tel¨®n de fondo de un problema de migraci¨®n cada vez mayor, el tratado sigue contando con muchos detractores. La Sra. Feller record¨® a sus cr¨ªticos que nunca se pretendi¨® que fuera un instrumento de control de la migraci¨®n, diciendo que "nadie en su sano juicio puede impugnar la continua pertinencia e importancia de las disposiciones fundamentales de la Convenci¨®n, que incluyen que no debe devolverse a las personas a la persecuci¨®n, que no deben ser objeto de discriminaci¨®n y que deben ser tratadas respetando plenamente su dignidad y necesidades b¨¢sicas".

Aun as¨ª, hay esperanzas en el n¨²mero descendiente de solicitantes de asilo. La experiencia afgana muestra que cuando mejoran las condiciones en casa, los refugiados regresan masivamente. De acuerdo con el ACNUR, el n¨²mero de solicitantes de asilo afganos ha descendido en un 83%, desde el grupo principal de 2001 con m¨¢s de 50.000 refugiados hasta el decimotercer lugar en 2004, con 8.800. El ACNUR acoge complacido estas historias que se coronan con ¨¦xito. El Sr. Guterres observ¨®: "Es una buena noticia, ya que muestra que, contrariamente a lo que creen muchos pa¨ªses industrializados, no existe un "problema creciente de refugiados". Espero que ayude a despolitizar la cuesti¨®n de la protecci¨®n de los refugiados y combata la intolerancia".