Cambios demogr¨¢ficos
Se espera que la poblaci¨®n mundial aumente en , de los 7.700 millones actuales a 9.700 millones en 2050, antes de alcanzar un m¨¢ximo de casi 11.000 millones a finales de siglo, a medida que siga disminuyendo la tasa de fecundidad. Durante este per¨ªodo, se prev¨¦ que la poblaci¨®n mundial ser¨¢ cada vez m¨¢s urbana y que la poblaci¨®n de 65 a?os o m¨¢s superar¨¢ en n¨²mero a la de menores de 5 a?os.
Se prev¨¦ que, de aqu¨ª a 2050, la mitad del crecimiento de la poblaci¨®n mundial se originar¨¢ en solo 9 pa¨ªses,?a saber: la India, Nigeria, el Pakist¨¢n, la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, Etiop¨ªa, Tanzan¨ªa, Indonesia, Egipto y los Estados Unidos de Am¨¦rica (en orden decreciente). Es probable que la poblaci¨®n de ?frica Subsahariana se duplique, mientras que la poblaci¨®n de Europa podr¨ªa disminuir.
Entretanto, hay movimientos de poblaci¨®n. Si bien el porcentaje de migrantes internacionales se ha mantenido en torno al 3 % del total de la poblaci¨®n mundial durante los ¨²ltimos veinte a?os, desde 2000 la cifra ha aumentado en m¨¢s de la mitad. Al mismo tiempo, el n¨²mero de personas que se han visto obligadas a huir de sus hogares ha aumentado considerablemente debido a los conflictos prolongados y podr¨ªa seguir aumentando debido al cambio clim¨¢tico y la degradaci¨®n ambiental. La gran mayor¨ªa de los flujos de migrantes y refugiados se dirigen hacia los pa¨ªses del Sur Global.
Crecimiento de la poblaci¨®n joven
En algunas regiones del mundo, los j¨®venes (entre los 15 y los 24 a?os) constituyen un importante segmento de la poblaci¨®n que aumenta r¨¢pidamente. En ?frica Subsahariana, donde se prev¨¦ que la poblaci¨®n total , la cantidad de personas en edad de trabajar(entre ) est¨¢ creciendo a un ritmo m¨¢s r¨¢pido que el de cualquier otro grupo etario. La mayor¨ªa de los pa¨ªses de Asia y de Am¨¦rica Latina y el Caribe ya han experimentado un crecimiento similar de la poblaci¨®n joven seguido de un crecimiento de la poblaci¨®n en edad de trabajar.
Mientras dure, el crecimiento relativo de la poblaci¨®n en edad de trabajar brinda una oportunidad para acelerar el crecimiento econ¨®mico: el denominado . En este contexto, los esfuerzos por alcanzar los Objetivo de Desarrollo Sostenible ¨C (como erradicar el hambre, garantizar una vida sana, promover la educaci¨®n y el aprendizaje permanente, crear empleo, mejorar la protecci¨®n social y reducir la desigualdad) pueden reforzar esas tendencias y ofrecer mayores oportunidades. Al mismo tiempo, el crecimiento de la poblaci¨®n joven puede poner las cosas m¨¢s dif¨ªciles a las finanzas p¨²blicas que ahora tienen problemas para proporcionar servicios a la juventud, o tambi¨¦n a la sociedad, que en los pr¨®ximos decenios tendr¨¢ que ocuparse del envejecimiento de la poblaci¨®n.
NOS HACEMOS VIEJOS
Hoy, las personas mayores (65 a?os o m¨¢s) constituyen el grupo de edad que crece m¨¢s r¨¢pido en el mundo. Globalmente y por primera vez en 2018, ,y para 2050 el n¨²mero de personas mayores superar¨¢ al de adolescentes y j¨®venes (entre los 15 y los 24 a?os). Algunas regiones, como Europa y Asia Oriental, ya se enfrentan a un reto considerable a la hora de apoyar y atender a esas personas. A medida que la esperanza de vida sigue aumentando, puede que el papel de las personas mayores en las sociedades y las econom¨ªas sea m¨¢s importante. Debemos adaptar los sistemas de educaci¨®n, atenci¨®n sanitaria y protecci¨®n social para proporcionar una red de protecci¨®n social a este grupo etario cada vez mayor.
PERSONAS EN MOVIMIENTO
Desde los principios de la humanidad, la migraci¨®n ha brindado oportunidades al ser humano. En 2019, la cifra de migrantes internacionales (personas que viven fuera de su pa¨ªs de origen) era de unos 272 millones, es decir, casi el 3,5 % de la poblaci¨®n mundial; en 2000, era del 2,8 %. Asia acoge al mayor n¨²mero de migrantes internacionales, pero en los ¨²ltimos a?os ?frica ha experimentado el crecimiento m¨¢s r¨¢pido. La mayor parte de las migraciones internacionales siguen produci¨¦ndose entre pa¨ªses de la misma regi¨®n geogr¨¢fica.
Los movimientos de poblaci¨®n se deben a muchas razones, entre otras, el trabajo, la familia y la educaci¨®n. Sin embargo, cada vez m¨¢s personas abandonan sus hogares y comunidades huyendo de la violencia, la persecuci¨®n, las privaciones o los desastres, en particular a causa del cambio clim¨¢tico. En conjunto, estos factores han hecho que en los ¨²ltimos decenios la cifra de personas desplazadas por la fuerza haya llegado a niveles sin precedentes: m¨¢s de 70 millones en 2018, entre ellos cerca de 26 millones de refugiados. Desde 2012, casi se ha duplicado la cantidad de refugiados atendidos por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Casi cuatro de cada cinco refugiados viven en un pa¨ªs que comparte frontera con su pa¨ªs de origen.
Los traficantes de personas han explotado la vulnerabilidad de los migrantes, uno de los factores que motiv¨® a los Gobiernos a adoptar el en 2018. No es un documento jur¨ªdicamente vinculante, sino un marco para apoyar la cooperaci¨®n internacional en materia de migraci¨®n.
EL FUTURO URBANO
Hasta 2009, viv¨ªan m¨¢s personas en el campo que en la ciudad. En la actualidad, alrededor del 55 % de la poblaci¨®n mundial vive en pueblos y ciudades, y se prev¨¦ que el nivel de urbanizaci¨®n ser¨¢ de casi un 70 % en 2050. Gran parte del crecimiento de la poblaci¨®n urbana tendr¨¢ lugar en Asia y ?frica, especialmente en China, la India y Nigeria, donde las tasas de fecundidad siguen siendo elevadas.
Al igual que la migraci¨®n, la urbanizaci¨®n requiere una gesti¨®n eficaz por parte de las autoridades nacionales y locales. En la actualidad, las ciudades ocupan menos del 2 % del total de la superficie terrestre del mundo, pero (PIB) mundial y m¨¢s del 70 % de las emisiones de carbono. La velocidad y la escala de la urbanizaci¨®n plantean problemas para garantizar la disponibilidad de vivienda, infraestructura y transporte adecuados, y contribuyen a los conflictos y la violencia. Casi est¨¢n clasificadas como ¡°pobres urbanos¡± y la mayor¨ªa vive en asentamientos urbanos informales.
Al mismo tiempo, es necesario redoblar los esfuerzos para garantizar que no se deje atr¨¢s a las personas que viven en las zonas rurales, incluso en lo que se refiere al acceso a la econom¨ªa y la sociedad digitales. Los peque?os agricultores, los ganaderos y los pueblos ind¨ªgenas desempe?an un papel vital en la producci¨®n de nuestros alimentos y la protecci¨®n de nuestro capital natural.
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